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Arquitectos: Inês Lobo Arquitectos
- Área: 9600 m²
- Año: 2016
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Fotografías:Leonardo Finotti
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La propuesta se basa en un principio de diseño que corresponde a un equipamiento público con este programa y dimensión, una construcción que por su diseño es capaz de generar, consolidar y articular espacios públicos y recorridos peatonales dentro de la malla urbana de la ciudad de Angra do Heroísmo. De este modo, no es en la forma del edificio, sino en la de los espacios abiertos generados por él, donde se busca el rigor geométrico y las formas claras, que acaban mandando en el diseño de lo construido.
El edificio se compone de dos cuerpos superpuestos que diseñan dos espacios abiertos, al norte y al sur del recinto. Un primer cuerpo en forma de U contiene una gran plaza abierta al sur, con vistas a la ciudad y al paisaje. Sobre este volumen descansa una cubierta viva que delimita al Norte con el jardín del Palacete Silveira e Paulo, en continuidad con la mancha verde del sitio.
Esta cubierta, pieza fundamental en el diseño del edificio, consolida y genera relaciones cercanas y lejanas en el territorio. En la escala del terreno, no sólo dibuja los límites de los espacios públicos colindantes, sino que soporta el recorrido que atraviesa la manzana y conecta la calle del este con la entrada exterior de la biblioteca, pasando por el jardín. Como parte más visible del conjunto, este elemento dibuja una línea de referencia en la escala de la ciudad: un cimiento virtual sobre el que se construyen los edificios y los espacios verdes que constituyen su entorno inmediato.
Con una calle interior, la planta baja contiene todas las zonas de almacenamiento, recepción y procesamiento de documentos, en una construcción de semisótano que crea una amplia plataforma sobre la que se asientan los espacios públicos del edificio.
En la planta de entrada, el diseño de los espacios de lectura está marcado por el principio general de continuidad, apertura y transparencia que preside la organización del programa de la Biblioteca. Fluido y permeable, la práctica ausencia de elementos formales de compartimentación y la baja altura confieren a los techos y suelos de esta planta un papel fundamental en la organización interna del programa. Las superficies alfombradas incrustadas en el suelo autonivelante continuo, con las correspondientes zonas de iluminación cubiertas con tela Barrisol, marcan los espacios de pausa, trabajo y lectura.
En el interior de la cubierta, la sala de lectura principal se ajusta a la nueva amplitud de la relación con el paisaje, a una escala interior que también se amplía. Es en el interior de esta caja de acero y cristal donde se establece la relación más cualificada con el paisaje lejano, a partir de las aberturas de cristal translúcido acanalado en el revestimiento continuo de vidrio en U. Esta ligereza y transparencia contrastan con el carácter masivo y pétreo del resto de la construcción de hormigón, en gran parte incrustada en el terreno: en la búsqueda de la mejor relación con la topografía, pero también de la escala adecuada para equilibrar el volumen de la construcción con un tejido urbano histórico y un contexto patrimonial sensible.